La bodega se sitúa en el emblemático Barrio de la Estación de la ciudad de Haro, que presenta la mayor concentración de bodegas de vino de la Rioja, cuya construcción a finales del s.XIX surge a partir del comercio del vino entre la Rioja y Francia a través del ferrocarril.
El pabellón permite un nuevo acceso a la bodega a través de una plataforma elevada respecto al paso de vehículos para crear un espacio cubierto de acogida de visitantes y tienda con sala de catas.
La intervención con lenguaje contemporáneo pone en valor la arquitectura centenaria de las naves origen de la bodega y que siguen en uso.